De regreso en NZ

...y se nos fueron de volada las tres semanas que pasé en Guadalajara!

Fue fantástico ver a amigos y familia, comer tacos, tortas ahogadas, tostadas de ceviche, coctel de camarón, Chaparritas, flan, helados... Un gusto volver a platicar con los amigos, conocer a mis sobrinos nuevos (de dos años), pasar unos días en Pinar de la Venta con mis papás... ¡Mil gracias a todos por unas vacaciones que disfruté muchísimo!

El "Puerco Araña" fue inevitable: ¡no nos perdimos la película de los Simpson!

Regresar a Nueva Zelanda fue otra experiencia. He decidido que México y Nueva Zelanda son como la Tierra y el Cielo: en México tenemos los colores, los sabores, la música, el calor, la actividad constante - los bienes terrenales! En Nueva Zelanda es la tranquilidad y paz, el aire fresco y el orden. Es genial poder ir de un mundo a otro y disfrutar ambos!!